REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA
Vol. 12, No. 2, Mayo-Agosto, 2024 http://revistas.uniss.edu.cu/index.php/margenes
Recibido: 10/1/2024, Aceptado: 15/4/2024, Publicado: 10/05/2024
Abstengo Sánchez, L. y García Herrera, Y. (2024). La identidad cultural en la juventud rural para el desarrollo local y comunitario. Márgenes. Revista multitemática de desarrollo local y sostenibilidad, 12(2), 158-174. https://revistas.uniss.edu.cu/index.php/margenes/workflow/index/1809/5
La identidad Cultural en la juventud rural para el desarrollo local y comunitario
Cultural Identity in rural youth for local and community development
Autores:
M. Sc. Liesly Abstengo Sánchez¹
lieslyabstengo@gmail.com
https://orcid.org/0000-0002-8153-6338
M. Sc. Yaimé García Herrera²
yaimegarcia6@gmail.com
https://orcid.org/0009-0003-1352-7549
¹ Universidad de Sancti Spíritus “José Martí Pérez”, Departamento de Educación Artística.Sancti Spíritus, Cuba.
² Vice Intendente de la Asamblea Municipal del Poder Popular Taguasco. Sancti Spíritus, Cuba.
RESUMEN
Es común en la actualidad el abordaje a temas del desarrollo local como vía de solución a las problemáticas comunitarias, especialmente a las rurales. Este desarrollo local necesita ser integral y sostenible en el tiempo por lo que se gesta en diferentes líneas estratégicas, como es el caso de la sociocultural. Dentro de los referentes necesarios para la gestación del desarrollo local y comunitario se encuentra la identidad cultural y dentro de los grupos etarios que coinciden, conviven y gestan comunidades y desarrollo, se encuentra la juventud. La presente revisión bibliográfica tiene como objetivo analizar los fundamentos teóricos que sustentan la identidad cultural en la juventud rural para el desarrollo local y comunitario. Se emplearon métodos y técnicas de acuerdo a las dinámicas de la investigación, que permitieron el desarrollo del proceso, la obtención de las principales concepciones, tendencias actuales y regularidades. Se determina como conclusión que, una juventud rural identificada culturalmente por su compromiso social y participativo propicia el desarrollo local y comunitario.
Palabras clave: desarrollo comunitario; identidad cultural; joven rural
ABSTRACT
Nowadays it is common to address local development issues as a solution to community problems, especially in rural areas. This local development needs to be integral and sustainable over time, which is why it is developed along different strategic lines, as is the case of the socio-cultural one. Among the necessary referents for the gestation of local and community development is cultural identity, and among the age groups that coincide, coexist and generate communities and development is the youth. The aim of this literature review is to analyze the theoretical foundations that support cultural identity in rural youth for local and community development. Methods and techniques were used according to the dynamics of the research, which enable developing the process, obtaining the main concepts, current trends and regularities. The conclusion is that a rural youth culturally identified by its social and participative commitment is conducive to local and community development.
Keywords: community development; cultural identity; rural youth
INTRODUCCIÓN
El establecimiento de nexos entre cultura y desarrollo resulta complejo, ya que el concepto de este último término ha estado relacionado, desde sus inicios, a enfoques economicistas, de crecimiento, además de ser identificado con altos niveles de producción y productividad, con acumulación de riquezas y progreso constante.
En la mitad del siglo XX se incorporan otras visiones para el desarrollo como los procesos culturales, políticos, sociales y ambientales; se reconoce el rol de la cultura, la creatividad y la diversidad cultural para resolver los retos del desarrollo sostenible, incentivar el crecimiento económico y fomentar la inclusión social.
Es necesario verlacultura desde un enfoque interdisciplinario. Aunque ella ha evolucionado con la historia de la humanidad, parte de concebir al hombre como sujeto social, cuya experiencia está basada en lo aprendido y vivido como miembro de una colectividad y determinado por sus propias reglas. De acuerdo con criterios de la Unesco (1982) la conceptualización de la cultura se reconoce en una acumulación de:
(…)rasgos distintivos, espirituales y materiales, intelectuales y afectivos que caracterizan una sociedad o un grupo social, que engloba además de las artes y las letras, los modos de vida, los derechos fundamentales del ser humano, los sistemas de valores, las tradiciones y las creencias. (p. 12)
Al respecto, el profesor Martínez Casanova (2022), considera que:
Sin pretender asumir este concepto como acabado, su uso nos permite identificar cuan amplia puede ser la cultura y, al mismo tiempo, poder apreciar la significación de la misma para la vida individual y colectiva y por tanto su inestable incidencia enlos problemas globales y locales. (p.567)
En la búsqueda de soluciones a las principales problemáticas en las comunidades se ha implementado la Conceptualización del Modelo Económico y Social Cubano de Desarrollo Socialista, los Lineamientos del PCC y el Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el 2030, que brinda protagonismo y poder en la gestión del desarrollo local y comunitario (Ministerio de Relaciones Exteriores [Minrex], 2021).
Varios autores espirituanos como Enebral Rodríguez (2012), González Sáez (2013), Beltrán-Marín et al. (2019), García-Viamonte et al. (2020), Blanco Montesino y Beltrán Marín (2021), se han referido teóricamente, desde la visión pedagógica, al fortalecimiento de la identidad cultural. De igual forma, pero con una visión sociocultural, otros autores como Juliá Méndez (2016), García Rodríguez et al. (2022) yCarballo Concepciónet al. (2022), han investigado acerca de la identidad y su concepción en los procesos de desarrollo local y comunitario. Todos ellos coinciden en potenciar el desarrollo integral de la cultura local.
La gestión del desarrollo local utiliza diferentes líneas estratégicas como el desarrollo sociocultural, cuya esencia es la identidad cultural y que en la actualidad se encuentra afectada por la globalización, la migración,el olvido de la memoria histórica y familiar, entre otrascuestiones que inciden, a su vez, desfavorablemente en la población y dentro de ella,en la juventud; por lo que, ante esta situación,se pretende analizar los fundamentos teóricos que sustentan la identidad cultural en la juventud rural para el desarrollo local y comunitario.
DESARROLLO
Las investigaciones sobre la juventud en Cuba toman mayor importancia con el triunfo de la Revolución, convirtiéndose en debate y reflexión tanto en el ámbito científico como en el popular. La juventud es un grupo etario capaz de traducir con lógica y racionalidad la realidad que le circunda.
En las ciencias sociales existe consenso acerca de que la juventud, en el orden psicológico, social, físico e identitario, trascurre entre la niñez y la adultez, y es una etapa de adquisición de derechos y deberes, así como de integración plena a la sociedad.
De acuerdo con criterios de Domínguez, (1988) la juventud es una categoría histórico - concreta, que designa “un grupo socio demográfico internamente diferenciado según su pertenencia a la estructura social, fundamentalmente de las distintas clases, capas y grupos que la componen, constituyendo su elemento más dinámico y móvil” (p. 100).
La juventudjuega un papel determinante en el progreso social. Comprende las edades entre 14 y 30 años, desglosada en las siguientes etapas y con características muy particulares en cada una:
La primera etapa, llamadaadolescencia, abarca de los 14 a los 19 años de edad, y es donde culmina el desarrollo biológico, concluyen los estudios de enseñanza media para dar paso al nivel medio superior y desde el punto de vista legal las personas alcanzan los derechos como ciudadano.
De 20 a 24 años, aparecenlas inquietudes profesionales en un primer momento, para luego dar paso a los estudios superiores y/o al comienzode la etapa laboral; también es el período en que, por lo general, forman su propia familia.
De 25 a 30 años de edad, afianzan las preocupaciones relacionadas con la familia, la profesión y el trabajo, se identifican con la vida adulta y sus responsabilidades.
En las circunstancias actuales, diversas áreas temáticas relacionadas con la juventud requieren ser investigadas, entre ellas: las transformaciones socioeconómicas, la ampliación de sus interacciones sociales y culturales, la orientación profesional y la continuidad de estudios, el desinterés por el trabajo en el campo, la emigración del campo a la ciudad, la necesidad de mayores niveles de participación y la identidad juvenil. Otros autores como Domínguez García (2021), se han destacado en la investigación sobre estas problemáticas.
La investigadora Morales Chuco (2017) realiza la caracterización de la juventud cubana de acuerdo con las identidades colectivas e identidades marginadas, refiriendo la influencia de mediadores como la profundización de las desigualdades, el debilitamiento de los procesos de formación y expresión de valores y el empobrecimiento de la participación social y política; que muestra elementos de fijación como:
a) fuertes vínculos con la familia de origen, con el grupo de amigos y con el barrio, que desestiman las diferencias ideológicas; b) el consumo y las prácticas culturales siguen asociados a la música, el baile y la televisión, que generan rutinas de grupos informales asentadas —fundamentalmente— en el espacio doméstico; c) percepción de ventajas y desventajas económicas, estas últimas centradas en insuficiencia de ingresos einsatisfactorias condiciones de su hábitat; d) baja fecundidad asociada a la migración, así como alaplazamiento de la formación de la familia propia y la tenencia del primer hijo. (p. 111)
Además, de elementos de cambio explícito como el,
(…) Incremento de las uniones consensuales. La migración interna hacia las cabeceras municipales y la capital del país. La migración externa generada por la reunificación familiar y la búsqueda de mejoras económicas. Pérdida del valor estudio y trabajo, particularmente el estatal, como mecanismos de ascenso social. (p. 88)
Ante las características que distinguen a la juventud, de otro grupo etario, se evidencia la necesaria guía y adecuada orientación para un mejor accionar. De acuerdo con Domínguez (2013) cuando refiere que:
Es necesario profundizar y continuar ampliando el protagonismo responsable de los jóvenes en la organización de su propia vida estudiantil y laboral, en su aporte y compromiso con las tareas que demanda la sociedad, y para todo esto, resulta esencial el trabajo sistemático y cohesionado de las instituciones, de las organizaciones políticas y de masas, entre las cuales deben tener un papel esencial las organizaciones juveniles en cada centro educacional o laboral. (p. 15)
El accionar de la juventud le define, siendo importante para las distintas áreas de la sociedad y su desarrollo, al respecto Marcial (2017) insiste en la necesidad de que exista:
(…) un protagonismo responsable de los jóvenes, quienes deben proyectar e incorporarse activamente en la consecución de los cambios que requiere la sociedad cubana, teniendo en cuenta las condiciones objetivas y subjetivas de nuestra existencia y la necesidad de preservar los valores primordiales de nuestro proyecto social socialista, los de identidad, soberanía y justicia social, que solo serán elementos que nos distingan se pasa a formar parte de la subjetividad de cada joven y cada ciudadano como asunción individualizada y personalizada de los principios que sustentamos como nación. (p.66)
La juventud cubana ocupa un elevado sitio entre las fuerzas que construyen el país y son firmes sostenes para la Revolución, según Díaz-Canel Bermúdez (2023):
Son los jóvenes los mejores revolucionarios porque reconocen las dificultades diarias y se enfrentan a ellas y tratan de cambiarlas, y lo logran muchas veces. Porque a pesar de la adversidad siguen sonriendo, amando y creyendo en la posibilidad de un país mejor, a pesar de que algunos los conviden a no participar, a destruir y a odiar. (párr. 50)
Más adelante sugiere que “Hay que convencer, pero sobre todo probarles a nuestros jóvenes que sí les será posible realizarse en su patria. Que propongan ideas, proyectos y prueben en la práctica su eficacia en función de un país mejor” (Díaz-Canel Bermúdez, 2023, párr. 54).
Aunque la característica fundamental que define a la juventud rural radica, precisamente, en el término de lo rural, resalta su interés porla emigración del campo a la ciudad, loque muestra desarraigo cultural. Esta juventud no está alejada del consumo cultural de moda, resultado del proceso de globalización, hecho que también debilita el gusto por la cultura campesina que le rodea y prima. También se caracteriza por sus valores éticos y morales como la sencillez y la laboriosidad, por ser alegres, activos y críticos, además de sentir preferencia por el uso de los medios tecnológicos y comunicativos actuales.
La temática rural se convierte en una prioridad de estudio para el gobierno cubano por las necesidades que presenta, además de ser un ente importante en el sostenimiento de la economía en las comunidades urbanas; es por ello que deviene entonces en una de las mayores preocupaciones para el desarrollo territorial.
Al respecto, la Celac (2015) asume que esta ruralidad:
Presupone no solo lo espacial, sino también lo social, los elementos identitarios de los varios espacios rurales, las costumbres alimentarias, las prácticas culturales, la cultura laboral profesional, sus diferencias en cuanto al sexo, edad, las relaciones de género, las representaciones sociales de los jóvenes respectos a la familia, la masculinidad, la feminidad, entre otros aspectos sociales que están presentes en las circunstancias actuales, dentro del contexto de lucha para avanzar hacia una mayor equidad y bienestar de los grupos sociales y de los pueblos. (Como se citó en Téllez-Rivera y Gálvez-Catalá, 2018, p.103)
Las comunidades rurales se caracterizan geográficamente por abruptas quebradas, hondos valles, llanuras, montañas, ríos, lagunas, exuberante vegetación, cuevas, diversidad de flora y fauna; en conclusión, bellos paisajes de gran significación biológica, histórica y turística, que forman parte de su patrimonio.
Abelardo Maiet al. (2022) en La Estrategia Juventudes Rurales de la Región SICA2022-2030 identifican que:
El rol de las juventudes rurales es clave en la transformación de sus territorios y su participación debe ser impulsada a través del acceso a recursos, oportunidades e inversiones, en dialogo con las políticas y planes de desarrollo rural a nivel regional, nacional y territorial. (p. 5)
Las autoras añaden además a la exigencia anterior, el necesario impulso desde las políticas públicas aprobadas de acuerdo a las dinámicas particulares y subjetivas de lo local y comunitario.
Al respecto los investigadores Colás Téllez y Pérez Rosel (2022) plantean que “(…) no se conciben procesos de desarrollo ajenos a las personas, a sus sentimientos, actitudes, valores, prácticas cotidianas e identidades” (p. 52). Además, no se pueden generar procesos de transformación social sin que necesariamente ocurran transformaciones en las subjetividades individuales y sociales.
Dentro de los gustos y preferencias que distinguen la identidad cultural en la juventud rural priman la monta de caballo, la cría de animales, las peleas de gallo, el rodeo, la música campesina, la décima y la música regional mexicana. Se identifican culturalmente con las raíces campesinas de sus comunidades rurales, pero desconocen de la historia local y de las tradiciones que no vivieron el proceso de generación en generación.Además, el interés por el disfrute de variedad de ofertas comerciales, gastronómicas y culturales atentan contra la permanencia en comunidades rurales.
Ante estos resultados se asumen las definiciones presentadas por la UNESCO (2007) en el artículo 2 de la Declaración de Friburgo sobre Derechos Culturales:
a) El término “cultura” abarca los valores, las creencias, las convicciones, los idiomas, los saberes y las artes, las tradiciones, instituciones y modos de vida por medio de los cuales una persona o un grupo expresa su humanidad y los significados que da a su existencia y a su desarrollo.
b) La expresión “identidad cultural” debe entenderse como el conjunto de referencias culturales por el cual una persona, individual o colectivamente, se define, se constituye, comunica y entiende ser reconocida en su dignidad.
c) Por “comunidad cultural” se entiende un grupo de personas que comparten las referencias constitutivas de una identidad cultural común, que desean preservar y desarrollar. (p. 5)
Se concluye que la identidad se va formando a partir de un proceso de interacción entre los procesos culturales y los individuos de una comunidad.
La identidad cultural cubana está ligada a la propia historia del país. Surge y provoca las gestas mambisas, la rebeldía, la revolución y en la actualidad se defiende de un contexto globalizado. En el ámbito educativo, el tratamiento a la dimensión identitaria implica la visión integral de los diferentes ámbitos como el social, natural y cultural.
La identidad cultural nace y se desarrolla desde la familia, pertenece a una cultura, idioma, historia y comunidad por sus hábitos, valores morales, éticos y estéticos, además forma elementos propios que la definen. Para el pedagogo del arte espirituano, Enebral Rodríguez (2012), este término brinda:
(…) pertenencia a un grupo social con el cual se comparten rasgos culturales, como costumbres, valores y creencias. Este concepto no es estático, se enriquece a nivel individual y colectivo y se alimenta continuamente de las influencias externas a que tienen acceso. Desde el punto de vista sociológico y psicológico, la identidad surge por diferenciación y como reafirmación al entrar en contacto con otro. (p. 28)
La identidad está ligada a la historia y al patrimonio cultural. La identidad cultural no existe sin la memoria, sin la capacidad de reconocer el pasado, sin elementos simbólicos o referentes que le son propios y que ayudan a construir el futuro. (p.29)
De igual forma, González Sáez (2013) realiza un análisis en cuanto a que el hombre es creador de su cultura y que por naturaleza debería ser el mayor protector de ella, “esta negativa acción humana ha impedido a lo largo de los siglos que las nuevas generaciones disfruten en su totalidad del rico patrimonio natural y cultural legado por sus ancestros, imposibilitando que este sea fuente nutricia de su identidad cultural” (p. 9)
Antiguamente la identidad cultural era solo creencias, comportamientos, rasgos, raíces, atributos, símbolos, características propias, costumbres, tradiciones, lo que define a un grupo, familia y comunidad, en la actualidad le implica además otros procesos como hacer suya las mutaciones de las tradiciones de generación en generación, hacerpatrimonio lo que ayer no era, las miradas hacia los flujos migratorios y ante la tarea del desarrollo local y comunitario definir la esencia de lo que somos para proyectar lo que queremos ser sin que se afecte.
Valdés Hurtado (2008) asume que:
La identidad cultural, lejos de ser un sistema cerrado e incomunicado, o el refugio de una cultura que pretende renunciar a sus nexos con la modernidad, es una relación de enlaces interculturales donde la modernización y el ideal de desarrollo no se sacrifican al enfatizar en las particularidades o principios nacionales o de regiones que incluyen varios países y, por tanto, culturas múltiples que permiten apreciarparticularidades enel contexto de una diversidad cultural. (…). (p. 26)
En el contexto actual globalizado, la población necesita mantener el amor y conocimiento de y hacia la comunidad, rol que se gana gracias a la identificación cultural.
Morales-Gómez et al. (2019), consideran que la identidad cultural se refiere a la construcción de la subjetividad de un individuo o grupo, que define su origen y actualidad, al tiempo que proyecta sus características esenciales y estables, corporeizadas en elementos objetivos y subjetivos compartidos, cuyos significados permiten establecer a su interior tendencias de continuidad, ruptura y emergencia, así como concientizar diferencias y semejanzas con otros significativos en un contexto determinado.
Los criterios y debates analizados en relación con la identidad cultural son abundantes, enfatizan la importancia y continuidad. Sobre este tema Molano L. (2007) infiere que: “Para que una o varias identidades culturales generen desarrollo territorial es necesaria una voluntad colectiva (política, comunal, empresarial, asociativa, etc.) y un reconocimiento del pasado, de la historia” (p. 75)
La conceptualización sobre el desarrollo ha sido enriquecida con el paso del tiempo.Desde los inicios, con el pensamiento económico clásico, hasta el contexto actual, su dimensión espacial ha dado lugar a que surjan conceptos como desarrollo territorial, desarrollo local, desarrollo exógeno, desarrollo endógeno, entre otros y cada uno con sus propias características.
El concepto de desarrollo local y las primeras políticas al respecto surgen en la década del 80 en Europa como respuesta a la crisis, luego se convierte en la búsqueda de soluciones de los países subdesarrollados, llegando a América Latina y en particular a Cuba. En correspondencia con los alcances de la presente investigación se asume al desarrollo local como:
Un proceso esencialmente endógeno, participativo, innovador y de articulación de intereses entre actores, territorios y escala (municipal, provincial y sectorial/nacional). Se sustenta en el liderazgo de los gobiernos municipales y provinciales para la gestión de sus estrategias de desarrollo dirigidas, desde la gestión del conocimiento y la innovación, al fomento de proyectos que generen transformaciones económico-productivas, socioculturales, ambientales e institucionales, con el objetivo de elevar la calidad de vida de la población. (Ministerio de Economía y Planificación [MEP], 2020, p. 3)
Visto desde la concepción sociocultural, el desarrollo ofrece una visión integradora de sus dimensiones, ubicando al ser humano en el centro de cualquier acción por la formación de capacidades transformadoras de la realidad, participación activa y responsable en el diseño y la implementación de las estrategias trazadas para el desarrollo. Definiendo que las dimensiones culturales llegan a cualquier sector de la realidad que se estudie, donde la prioridad son los aspectos subjetivos de los procesos.
A la mirada sociocultural del desarrollo le agrupa un sentido humanista y una concepción participativa, estimulando la formación y desarrollo de las capacidades de los implicados, la intencionalidad de valorizar potenciales endógenos en las comunidades, impulsar acciones que fortalezcan la identidad y el patrimonio local; y la mirada priorizada a la subjetividad, los símbolos, las tradiciones, las formas de hacer, relacionarse y agruparse.
Para Terry Gregorio (2011), la valoración de la identidad cultural como un factor de referencia estratégica para la planificación de un modelo de desarrollo comunitario rural integrado se debe, entre otras razones, a los factores principales que la configuran. Ellos son, entre otros, los siguientes:
a) El histórico: es la base de la conformación de la conciencia o memoria histórica que se refuerza en la medida en que cada generación asume la tradición heredad, la conserva, la renueva y la transmite a la siguiente, permitiendo conservar la identidad cultural de la comunidad.
b) El lingüístico: si la cultura es dialogo, intercambio de ideas y experiencias, apropiación de otros valores, tradiciones y creencias, la lengua es el factor que garantiza la socialización de esos conocimientos a través de un intercambio cultural entre los miembros de la comunidad, la lengua decirme denominador común para establecer un sistema de relaciones afincadas en una historia, en un espacio y grupo social común.
c) El psicológico: supone ciertas permanencias de las estructuras síquicas de los miembros de la comunidad que son el resultado de un proceso de aprendizaje social en el cual desempeña un papel esencial el entorno histórico/cultural. (p. 13)
El análisis crítico de estos referentes teóricos permite asumir los criterios de Juliá Méndez (2016) acerca de la centralidad de la identidad cultural en la legitimación de los procesos de desarrollo local y comunitario, porque esta:
Tiene una fuerte connotación en los procesos de desarrollo local y comunitario, pues condiciona y refleja los comportamientos, los sistemas de valores, la espiritualidad, la ideología, las formas de actuar de los grupos humanos y de las comunidades. Está relacionado con la idiosincrasia, las costumbres, las tradiciones; marca determinados rasgos de la cultura popular, se expresa en el pensamiento social y en las creaciones artístico-literarias de las comunidades humanas. En este sentido, es estratégico orientar los esfuerzos que se llevan a cabo en el ámbito local para el fortalecimiento de las identidades, el patrimonio y la diversidad de expresiones culturales y se desarrollen sus capacidades para la gestión creativa e innovadora a nivel local. (pp. 18-19)
La identidad cultural tiene una fuerte connotación en los procesos de desarrollo local y comunitario, pues condiciona y refleja los comportamientos, los sistemas de valores, la espiritualidad, la ideología, las formas de actuar de los grupos humanos y de las comunidades. En este sentido, es estratégica la orientación de los esfuerzos que se llevan a cabo en el ámbito local para el fortalecimiento de las identidades, el patrimonio y la diversidad de expresiones culturales; al tiempo que se fortalezcan las comunidades culturales y se desarrollen sus capacidades para la gestión creativa e innovadora a nivel local y comunitario.
CONCLUSIONES
La identidad cultural es proceso y resultado, base del desarrollo local y comunitario, una forma de asumir y actuar en este, permite el reconocimiento y la apropiación de la memoria histórica del pasado para su desarrollo futuro. La identidad cultural revive comunidades, puebla zonas rurales, despierta interés en población apática, logra unidad, suple vulnerabilidades y desencadena actividades económicas, propiciando el desarrollo y bienestar colectivo e individual que se traduce en la mejora de la calidad de vida.
Ante las demandas actuales de la sociedad en las comunidades rurales existen capacidades que son importantes para el logro del desarrollo local como la relación que se establece entre identidad cultural y juventud rural. Una juventud rural identificada culturalmente por su compromiso social y participativo se convierte en un ente importante para el desarrollo local y comunitario.
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Valdés Hurtado, A. (2008). El béisbol en la formación de la nacionalidad cubana [Tesis de pregrado, Universidad Central de Las Villas, Cuba]. https://dspace.uclv.edu.cu/server/api/core/bitstreams/1654ae5d-8268-401b-8a27-f54d29d63f8a/content
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Conflicto de intereses: Los autores declaran no tener conflictos de intereses. |
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Contribución de los autores: L.A.S.: Investigación, fundamentación, conceptualización y redacción. Y.H.G.: Fundamentación y conceptualización. |
Márgenes
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